Entre mi círculo cercano es alto el número de personas que pedimos leche vegetal o deslactosada al salir por un café. De mis amigas más cercanas, dos tienen intolerancia al gluten, otra a los lácteos y todas decidimos bajar nuestra ingesta de azúcar por salud. En mi caso aún más porque mi papá tiene diabetes. Por esta razón, siempre busco opciones que ofrezcan al menos alguna de estas restricciones.
En Quito, por suerte, ya contamos con más opciones y muchas de ellas se esforzaron no solo en la comida, sino en que el espacio sea lo más acogedor posible. Comer sano no tiene que ser aburrido. Más aún ahora que muchas mamás deben estar organizándose con el regreso a clases. Balancear trabajo y hogar siempre será un reto. ¡Qué mejor que tener a estas cafeterías de aliadas!
L’ Almendra
Para las mamás emprendedoras que buscan comer sano y sin culpa –mientras trabajan y esperan que sus hijos salgan de la escuela– está L’ Almendra. Una cafetería, ubicada en las calles Luxemburgo y Holanda, en el centro norte de Quito. Es un espacio pequeño y su menú está pensando para gente que busca una alimentación keto. Sus platos no tienen gluten ni azúcar. Su fundadora Nicole Iturriaga cuenta que la idea nació porque ella siempre ha tenido un estilo de vida saludable, encontrando un balance entre el ejercicio, la alimentación y el disfrute. Cuidarse no tiene que ser restrictivo.
Este local por las tardes está lleno de gente trabajando o, simplemente, disfrutando de una buena conversación. Aquí se ofrecen varios postres como el tiramisú, que es uno de los más vendidos, pero mi favorito es el blondie. Los precios varían desde los US$ 5. También, poseen opciones de sal como sándwiches, con pan sin gluten, keto o de masa madre. Y –dentro de este mundo saludable– el matcha es un protagonista.
Si se combina este té con otros superalimentos podemos obtener más beneficios. En L‘ Almendra existen opciones con mango, agua de coco e incluso con espirulina. Esta última tiene potentes antioxidantes que refuerzan el sistema inmune y es considerada una proteína vegetal de muy buena calidad. Aquí las bebidas al igual que los platos son muy aesthetic, como de revista. Sus 22 recetas son una invitación para pensar más en ti y en tu salud.
Alegría Real Food
Otra opción es Alegría Real Food, ubicada en Tumbaco y en Quito. El primero es mucho más familiar, ya que tienen espacios al aire libre; mientras que, el segundo es más acogedor para trabajar. Los desayunos me gustaron por la calidad del pan, que tampoco tiene gluten, azúcar o lácteos. Su fundadora, Alegría Verdezoto, comenta que abrió este local con el objetivo de brindar un espacio donde realmente los celíacos pueden disfrutar de comida, con el mismo sabor y textura de los alimentos que no pueden ingerir.
De hecho, la responsabilidad con sus clientes hace que solo tenga productos aptos para celíacos y así evita la contaminación cruzada. Los precios de los platos rondan los US$ 15, que representan la inversión de reemplazar el gluten, los lácteos y el azúcar. De acuerdo con su creadora, ellos buscan la innovación constante. Cada seis meses cambian el menú para satisfacer a sus tres tipos de clientes.
El primer grupo está conformado por aquellas personas que realmente tienen una intolerancia y llevan esta dieta por prescripción médica. En el segundo grupo están los que solo lo hacen por tener un estilo de vida más saludable; y el último está conformado por aquellos que lo hacen por seguir una tendencia. ¿Lo interesante? La mayoría de sus clientes son extranjeros, quienes llegan por medio de la aplicación Find me gluten free.
Sisters Kitchen
Aunque no es una cafetería 100 % keto, Sisters Kitchen tiene muchas opciones sin gluten. Los avo waffles toast son una de las opciones de sal, que contiene unas waffles de yuca, queso asado de búfala, huevos fritos y una mermelada de tomates cherry. Los emplatados, así como la cafetería, son instagrameables. El ambiente –cálido y sin ruido– es ideal para conversar o trabajar. Están ubicados en Tumbaco, en Plaza Veleta. Para aquellos que les resulta lejos, pueden encontrar sus waffles de sal y de dulce congelados, en el Datu Deli.
Puedo decir, con certeza, que el matcha frío de aquí es el mejor que he probado, ya que usan un té ceremonial de alta calidad, por su color y su sabor. Su costo ronda los US$ 6. Y –para los amantes del dulce– está el pan de banano, sin gluten, o los waffles de calabaza con queso ricotta y fruta de temporada, que cuestan US$ 11. Según Doménica Játiva, también puedes encontrar granola sin gluten.
Si buscas opciones para complementar las loncheras de tus hijos, un lugar para trabajar o para pasar una tarde con tus amigas, estas cafeterías pueden ser una gran alternativa. Para muchos aún resulta aburrido, pero es cuestión de educar al paladar. La experiencia empieza por los ojos y estas mujeres hicieron que sus platos enamoren a primera vista. (I)