Cortesía Cubel
Cortesía Cubel Cubel

Cubel sostiene una visión en la que la moda no actúa como intérprete, sino como vehículo. Para su director creativo, Humberto Cubides, cada prenda comunica las historias de las comunidades. “Realmente son ellos los que se narran desde su práctica artesanal. Las siluetas que creamos en Cubel son un lienzo que se engrana con el poder de la artesanía y el valor de sus significados”. La marca construye sus colecciones desde las prácticas manuales, artísticas y textiles, donde el trabajo artesanal siempre está en el centro. 

El diseñador colombiano reconoce que no decide el valor simbólico o social de los textiles, porque ese valor nace mucho antes de que la moda intervenga. 

“La artesanía es una tecnología milenaria y humana. Somos afortunados de disfrutar un trabajo heredado entre generaciones”. 

En su proceso creativo, la marca selecciona técnicas, historias y materiales que pueden reinterpretarse sin desvirtuar su origen y establece límites para evitar que el diseño reemplace o distorsione significados. “Mi aporte es estético y técnico, pero el oficio sobrepasa la belleza. Proviene de conocimientos sembrados en nuestras sociedades latinoamericanas por comunidades indígenas que llegaron primero a estas tierras”.

Para él, el lujo sigue vivo en los detalles, en los materiales y en las condiciones en las que nace una pieza. Reconoce que Europa construyó la idea de que el lujo le pertenece, pero defiende que Latinoamérica amplía ese concepto desde un territorio donde conviven técnicas, narraciones y memorias que no buscan excluir, sino valorar. En esa lectura, la moda se convierte en un puente que permite reconocer un patrimonio material e inmaterial propio.

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Reinterpretar técnicas tradicionales dentro de una narrativa contemporánea internacional presenta un desafío inevitable: el tiempo. “Compartir una idea o un boceto con una comunidad artesanal y que ellos logren entender nuestras necesidades técnicas, estéticas y de calidad es el principal reto”. Ese proceso de negociación creativa define la esencia de Cubel: una marca que no acelera sus ritmos para adaptarse a la industria global, sino que ajusta la industria a los ritmos de la comunidad.

Cubel no se entiende a sí misma únicamente como una marca de moda, sino como un movimiento estético y social. Para su creador, la moda debe servir y no solo vestir. Así que buscan representar un territorio complejo que incluye el campo, lo urbano, la música, las artes vivas y los oficios que se transforman en prácticas culturales distintivas. Esa motivación se traduce en universos que permiten al público comprender el origen conceptual, histórico y estético de cada pieza.

Ahora, Cubel presenta La Colmena A.W. 2026, una colección nacida de su inmersión en los valles de Cundinamarca y del trabajo conjunto con artesanas de Cucunubá. La propuesta celebra la feminidad que se teje en la tierra y la sabana, donde las técnicas heredadas convergen con el diseño contemporáneo. Esta colección estará disponible a partir del evento del Bogotá Fashion Weekend –en el Centro de la Felicidad Chapinero– desde hoy, 28 de noviembre, hasta el domingo. 

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En este trabajo aparecen tres figuras simbólicas —La Campesina, La Artesana y La Sabia—, encarnadas en los nombres de Sol (Sué), Luna (Chía) y La Abeja. El avispero aparece como metáfora del tránsito entre lo antiguo y lo nuevo, reforzada por la presencia de técnicas ancestrales como el croché, el tejido a dos agujas y volúmenes que evocan estructuras orgánicas.

Los tonos tierra, cálidos y profundos, conectan la propuesta con la sabiduría indígena de América Latina, mientras que un negro invernal introduce un guiño gótico cargado de espiritualidad. Más de 40 artesanos participaron en la creación de las piezas, acompañadas por accesorios de Doos Eyewear, Curandera y Roor. La colección se inspira en el trabajo incansable de las abejas como símbolo de la vida femenina: un equilibrio entre opuestos —veneno y alimento, peligro y recompensa— que, al igual que la artesanía, sostiene la continuidad de la vida. (I)

*Corresponsal Pietro Polit.

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