A esta altura de la vida debes tener una rutina clara para el cuidado de tu piel, sobre todo en un país como Ecuador, que recibe rayos solares de una manera perpendicular y eso determina mucho el trato que debes tener con la piel. La pregunta es: ¿confías en esa rutina? Quizás es momento de que visites a un experto para saber si lo que haces es lo adecuado.
Harper’s BAZAAR Ecuador conversó con profesionales de la cosmetología que explicaron cuáles son los cuidados iniciales para tener una piel perfecta, tomando en cuenta los climas ecuatorianos.
La piel en Quito, más cerca del sol
Con una temperatura promedio de 20 grados centígrados, una altitud de 2.850 metros sobre el nivel del mar y con dos estaciones —una seca y una lluviosa, a veces el mismo día—, Quito es una ciudad que requiere particularmente de protección solar e hidratación.
“Yo les digo a mis clientes que el sol no combina con la piel bonita”, explica Marita Matos, especialista en estética, con una especialización en cosmetología clínica. “Estamos muy cerca de la radiación solar, así que la protección no es negociable".
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Para Quito, la experta recomienda usar protectores con un Factor de Protección Solar (FPS) a partir de 40. “Estamos hablando de una protección de pantalla total”. ¿Algo adicional? Sí, el filtro debe tener activos dentro de su formulación que protejan en contra de rayos UVA y UVB —dos tipos de radiaciones ultravioleta—, algo que se puede leer en las etiquetas. “Los rayos UVA son los que causan incidencia, tanto en el bronceado de la piel como en el fotoenvejecimiento”.
No hay que olvidar ponerse cada dos a tres horas el protector solar. Y, en el caso de mujeres con más de 40 años, la recomendación es usar productos que contengan ácido hialurónico, retinol y hasta vitamina C.
Sí, la protección solar es el principal elemento a considerar. Sin embargo, para gente que está expuesta mucho al sol, Matos habla de nutricosméticos como ayuda adicional. “Se pueden consumir antioxidantes, en forma de cápsulas, para protección celular”.
La hidratación es sumamente importante, sobre todo en la capital del país porque su clima no ayuda a mantener una piel hidratada. ¿Qué se debe hacer? Para Matos es sencillo: “hay que usar una buena crema que tenga activos que humecten e hidraten, para que protejan la barrera cutánea y que la piel se vea humectada. Toda, no solo la de la cara”.
Matos afirma que al hidratarse la piel se está previniendo el envejecimiento y la dermatitis, que es la inflamación de este órgano.
Matos reconoce que el cuidado es una preocupación que se da en mujeres cada vez más jóvenes, interesadas en tener una piel saludable. Esto también significa usar un limpiador para quitar “todo lo que es el sudor y las impurezas. Este puede ser un gel o un espumoso”, dice la experta. De ahí tiene que venir el hidratante y finalmente el protector solar.
“Cuando se llega a cierta edad hay que incrementar otros productos para mejorar el skincare. Por ejemplo, podemos añadir un sérum, dependiendo de lo que necesitamos, para manchas o antiedad”. Pero advierte: “tampoco hay que tener miles de productos”.
El cuidado en Guayaquil, terreno de la humedad
Si bien Guayaquil no está tan cerca de la Mitad del Mundo como lo está Quito, eso no significa que el sol no pegue con fuerza. Además, hay que considerar su temperatura promedio de 30 grados centígrados y su humedad relativa del 76 %, como factores determinantes para el cuidado de la piel.
Sin embargo, no hay mucha diferencia con lo que se debe hacer en Quito. “El bloqueador tenemos que usar en el país, en todos los climas; el hidratante, en todos los climas, y el humectante, también. La única diferencia va a ser la base de cada producto”, dice Andrea Del Vecchio, cosmetóloga con estudios en dietética y estética. Se refiere a los que se hacen con bases oleosas y con acuosas, estos últimos tienen una mayor utilidad en climas cálidos.
Del Vecchio manifiesta que debido al sol y a la humedad la piel pierda hidratación. Para evitar esto es importante la humectación.
En términos de limpieza, Del Vecchio dice que es necesario utilizar productos que no limpien a profundidad las pieles, para mantener la hidratación natural. “Solo si tienes una piel realmente seca, puedes optar por leches y cremas, pero para pieles normales o mixtas es mejor usar geles de limpieza”, cuenta la experta.
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Ella se detiene para hablar de algo que la gente no toma en cuenta. “Las pieles grasas y mixtas también pueden estar secas. Ya que al hablar de piel grasa estamos hablando de aceite, no de agua. Podemos tener una piel grasa y deshidratada al mismo tiempo. En este caso hay que hidratar, controlar el exceso de sebo y humectar”.
Para una limpieza mucho más adecuada, Del Vecchio recomienda la tendencia del double cleansing o doble limpieza. “Es perfecta para nuestro clima, porque primero vamos a desmaquillar. Y luego vamos a utilizar un producto para limpiar la piel, que son dos cosas completamente distintas”. Si se usa el desmaquillante como producto de limpieza, no se obtienen buenos resultados.
Así que –si bien en un clima como el de Guayaquil– se pueden usar los mismos productos y casi en el mismo orden a diario –hidratante, humectante y bloqueador solar– se deben agregar otros pasos. “Para la rutina básica en la mañana se podría usar un tónico para mantener hidratado el pH de la piel. También añadiría el antioxidante que puede funcionar o no como humectante, dependiendo de la base que tenga”, concluye. (I)
