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Quito Fashion Week 2025: un primer desfile mostró la diversidad creadora en el país

La primera pasarela de este año encendió la temporada con una explosión de diseño, técnica y visión. Seis propuestas mostraron el talento que impulsa la moda ecuatoriana y anticiparon días llenos de creatividad, identidad e innovación.

Por Eduardo Varas Carvajal

Foto: Malad Goyes. —

Todo estaba previsto para las 16:00, pero la tarde lluviosa y el movimiento propio del Black Friday caotizaron el tráfico en Quito. El trayecto hacia el Centro de Convenciones Fortaleza D.I.S., una de las sedes del Quito Fashion Week 2025, tomó más de lo habitual y ocasionó un retraso en el cronograma. 

El ambiente, marcado por el frío capitalino, recibió a los invitados entre bancas negras que flanqueaban una pasarela de casi 40 metros. Mientras esperaban las seis colecciones de la jornada inaugural, los asistentes disfrutaron en los distintos stands de maquillaje, bebidas y marcas aliadas, entre ellos el de Harper’s BAZAAR Ecuador.

Si bien la inauguración del evento fue el jueves 27, con una charla magistral y una cena con subasta de looks, el Quito Fashion Week 2025 arrancó propiamente ayer, 28 de noviembre, con un desfile que reveló las más recientes colecciones de media docena de diseñadores, en una jornada definida como Fashion Forward. Trajes, vestidos, propuestas que miraban al futuro, accesorios que acompañaban y brillaban con las luces de los reflectores. Piezas que son parte de proyectos como: Ropero de Oli, Emilio Astudillo, Luzu y Vicunha, Laiz, CM Activewear y Liebre Clothing.

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El Ropero de Oli llevó a la pasarela una colección inspirada en la buganvilla, la planta trepadora de tonos rojizos fuertes, bajo la idea de ser “un tributo a la belleza que crece incluso en los lugares más inesperados”. Los ocho vestidos de su propuesta tuvieron como punto de partida una formalidad en versión española, sobre todo para fiestas nocturnas, con atuendos en colores como verde oliva y salmón, adornados con volados y flecos.

El Ropero de Oli en el Quito Fashion Week. Foto: Malad Goyes.

El cuencano Emilio Astudillo también regresa al Quito Fashion Week, luego de su participación en la edición inaugural, en 2024. Con una sastrería para hombre y mujer, sus diseños fueron de lo formal a lo casual, pasando por lo preppy y por el uso de una bata como elemento de ruptura.

Emilio Astudillo en el Quito Fashion Week. Foto: Malad Goyes.

Luzu y Vicunha aparecieron en tándem. Se trata de una unión definida como un “puente entre tradición, creatividad e innovación, llevando a la pasarela un mensaje fresco, versátil y lleno de identidad”, según la información del evento. Luzu mostró su colección Raybana, un statement que cruza el poncho andino, el denim y el street style, que da como resultado una mezcla entre lo tradicional y lo contemporáneo, que sorprendió a todos.

“Esta colección tiene un trasfondo muy importante en mi vida. Yo soy del sur de Quito, me crié en aquella zona y tengo un espíritu muy de la calle, de los barrios… crecí viendo cómo la gente usa cosas increíbles solo porque sienten frío o porque les gusta”, enfatiza Eliana Luzuriaga, al hablar sobre el inicio de sus diseños bajo la marca Luzu.

Luzu Vicunha en el Quito Fashion Week. Foto: Malad Goyes.
Luzu Vicunha en el Quito Fashion Week. Foto: Malad Goyes.

Lo de Laiz –en cambio– se movió por un sentido de elegancia, sofisticación y una vibra urbana, con una gran conciencia de cuidado al utilizar materiales sin fibras animales. Lo que se ve como cuero, no era cuero y la combinación de texturas, cortes y materiales hizo que los atuendos que presentó tuvieran una fuerza inusitada.

LAIZ en el Quito Fashion Week. Foto: Malad Goyes.

CM Activewear es la marca de Cintia Mosquera enfocada en prendas para mujeres en movimiento. Es decir, no solo es lo que se ve, sino su funcionalidad. Vestidos con faldas cortas, diseños que tomaban como referencia atuendos para jugar tenis. Un halo de elegancia y altivez a través de leggins y un gesto casual con ropa perfecta para el verano de Quito.

Cintia Mosquera en el Quito Fashion Week. Foto: Malad Goyes.

Liebre Clothing presentó una serie de atuendos de su colección Entre el amor y la guerra en los que el concepto de los postapocalípticos fue la base de la tensión entre la sensación de final y el amor, a través del uso de telas y patrones urbanos, que se compaginan con encajes y velos. Sin duda, fue uno de los desfiles más rupturista, con piezas andróginas llevadas por modelos que corrían, que solo daban pocos pasos en la pasarela y se regresaban o que se abrazaban entre ellos.

“Yo me he cuestionado, tanto a nivel sensorial y personal, el hecho de que a la pasarela se la use muchas veces solo como una vitrina, que sean maniquíes que caminan. En realidad, para mí, es un escenario y eso les transmití a los modelos y les encantó”, dijo Fernanda Bertero, de Liebre Clothing, al explicar lo performático en su trabajo.

Liebre en el Quito Fashion Week. Foto: Malad Goyes.

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El Quito Fashion Week 2025 se desarrolla hasta el próximo 3 de diciembre en dos sedes: la Biblioteca Nacional Eugenio Espejo —ubicada en las calles Luis Sodiro y Valparaíso—, así como en Fortaleza D.I.S. —en la Av. De los Granados—. Cuenta con la participación de 60 diseñadores —45 nacionales y 15 extranjeros— distribuidos en seis pasarelas y un fashion show. (I)