A menudo se dice que si puedes identificar a una persona solo por su silueta y su cabello, esa es la marca de un verdadero ídolo. ¿Elvis habría sido Elvis sin su tupé? ¿Qué hay de Tina Turner y su volumen puntiagudo? ¿Lady Gaga habría despegado sin su moño? Un peinado icónico puede ayudar a un artista pop a pasar de ser una moda pasajera a un ícono certificado. Piensa en la cola de caballo alta de Ariana Grande, las mechas bicolor de Billie Eilish, las pelucas bouffant de Dolly Parton y la melena hasta la cintura de Cher; un estilo distintivo puede dejar un impacto duradero.
Diana Ross, cuya carrera abarca más de 60 años, todavía hace sus propios rizos voluminosos y maquillaje, y fue parte del moodboard de belleza del desfile de Marc Jacobs primavera 2024. “Podría estar jugando charadas y hacer el gesto de rebotar un cabello invisible, y la gente reconocería a Diana Ross”, dice el estilista Clayton Hawkins, quien trabaja con Olivia Rodrigo. “Si imito el gesto de lanzar mi cabello y lamer mis labios, la gente sabrá que estoy imitando a Cher.” La personalidad, el carisma y los éxitos musicales pueden dar longevidad a las estrellas pop, pero su cabello puede convertirlos en una marca auténtica.
Rihanna, fundadora de Fenty Beauty y Fenty Skin, lanzó Fenty Hair en junio de 2024. Beyoncé lanzó su propia línea de cuidado capilar, Cécred, en febrero. Una peluca rosa (como la de Lil’ Kim y Nicki Minaj) o un volumen descomunal (recuerda el cabello súper alto de Miley Cyrus en los Grammy 2024) pueden eclipsar incluso el vestido más atrevido. “El cabello es el principal dictador de la imagen, porque entendemos que el cabello es la tela que realmente está unida a nosotros mismos; es parte de quiénes somos”, dice el estilista Bob Recine, quien también es artista visual y ha trabajado con Lady Gaga y Miley Cyrus. “Es lo primero que toca emocionalmente a una persona: ver el cabello de alguien.”
Recine sostiene que la palabra “pop” no tiene que ver con la música, sino con el arte, y la estrella pop que entiende cómo el cabello juega con la identidad puede permanecer relevante. “Las estrellas pop tienen todas estas eras o álbumes en los que proyectan imágenes”, dice Recine. “Entienden el poder de algo más allá de lo que escuchas, la visualidad de su trabajo. Es algo en lo que una estrella pop muy dedicada realmente invierte tiempo.”
Pelucas, extensiones y acceso a los mejores estilistas permiten a las estrellas pop cambiar su cabello a voluntad, pero no siempre es bien recibido. El estilista Yusef (nombre conocido solo por sus looks experimentales en Rihanna, que le han valido tanto elogios como “amenazas de muerte” de fans críticos en Instagram) dice que se enamoró de las estrellas pop y el cabello tras ver el flequillo de Janet Jackson en el video de “The Pleasure Principle”. “Me encantaba su negritud en el cabello. Nunca habías visto a una mujer negra con tanto movimiento.” Su relación con Rihanna se basa en la confianza mutua y la magia de la confianza. “Trabajo con muchos artistas y les digo: ‘Si quieres ser aventurero y probar diferentes looks, tienes que apropiarte de ellos, porque eso es lo que buscan los fans’”, dice. “Con Ri, ella se apropia de cada look y lo hace suyo. Hace que las chicas sientan que pueden probar cualquier cosa si se comportan así.”
Las personalidades pop de artistas como Jackson, Madonna, Rihanna, Cher y Gaga están tan establecidas que pueden permitirse evoluciones capilares que muchos de sus contemporáneos no. “Madonna es el modelo de cómo ha transformado su imagen”, agrega Hawkins. “La gente pensaba: ‘Tienes que reinventarte constantemente para mantener el interés’. Cuando otros han intentado reinventarse, no funciona.”
Esto se debe a que actualizar tu imagen es arriesgado: un corte de cabello puede hacer o deshacer un ciclo de álbum. Puede anunciar un renacimiento, como el pixie rubio de Miley Cyrus en 2012. Algunos fans atribuyen el pixie de Katy Perry como la razón por la que su álbum Witness no cumplió las expectativas; no todos los cortes dan el mismo resultado. Cuando Britney Spears cambió su rubio con mechas por un castaño oscuro mientras grababa Blackout, se convirtió en objeto de escrutinio público. Más tarde revelaría en su autobiografía que la obsesión con su imagen la llevó a raparse la cabeza en febrero de 2007.
Algunos argumentarían que no necesitas actualizar tu imagen para hacer y retener influencia. Tomemos a Taylor Swift. Ella tiende a mantener un estilo distintivo. Ha madurado desde su debut en 2006, pero en 18 años ha pasado de rizos a bob, a largo con flequillo, más un breve momento rubio platino. Rara vez experimenta más allá de su rubio ceniza.
“Creo que la transformación depende de cada caso”, dice Yusef. “Cuando piensas en Amy Winehouse, tenía una estética, así que funcionó. Nunca quise verla con raya al medio y cabello lacio. Algunas personas están atadas a su look. Para las estrellas pop, es importante no solo reinventarse, sino evolucionar.”
Beyoncé ha cambiado su peinado innumerables veces en 25 años, pero el look con el que pasará a la historia es su rubio miel. El rubio es un básico para Beyoncé; puedes ver fotos de ella en Destiny’s Child con ese tono. Ahora luce rubio platino con el lanzamiento de Cowboy Carter. Cuando piensas en ella, probablemente la imaginas rubia, como si fuera su color natural.
“Si miras atrás, no muchas mujeres de color eran rubias, y mucho menos rubia miel”, dice Hawkins. “Miras a todas las estrellas de cine y cantantes negras del pasado, Tina Turner tenía mechas, pero una mujer negra rubia? Ese es el look de Beyoncé. Creo que ese impacto es enorme.”
Al final del día, el álbum puede estar nominado al Grammy y las canciones pueden dominar TikTok, pero el cabello es una de las partes más cruciales de la identidad de una estrella pop. “Cuando actúas en el escenario como estrella pop, el cabello es parte de la coreografía”, dice Hawkins. “El maquillaje es hermoso e importante, pero no puedes mover tu maquillaje para lograr un efecto dramático.”
Este artículo salió originalmente en la edición de agosto 2024 de Harper’s BAZAAR Estados Unidos.
