¿Qué pensarías si una experta en el cuidado de la piel te dijera que el truco infalible para potenciar los efectos de tu crema solar está en la incorporación de un antioxidante en la rutina de cuidado facial? Sí, has leído bien. Cuando hablamos de protección solar, solemos pensar en filtros SPF. Sin embargo, cada vez son más los expertos que subrayan la importancia de incluir la vitamina C como antioxidante para lograr una defensa eficaz además de completa.
Esto se debe a que la combinación de un antioxidante como la vitamina C con el protector representa una alianza muy efectiva. "Mientras que el fotoprotector actúa como un escudo externo, la vitamina C fortalece desde el interior. Este activo no solo neutraliza los radicales libres generados por la exposición del sol, sino que, al utilizarlo antes del bloqueador, mejora su capacidad para combatir los daños provocados por los rayos ultravioleta", explica Cristina Batres, farmacéutica de 123 farmacia. De esta forma, cuando combinamos un antioxidante como la vitamina C con el protector solar, creamos una doble barrera que ayuda a prevenir el envejecimiento y otros daños.
¿Cómo se debe aplicar la vitamina C?
Es quizás una de las preguntas más repetidas, pues en este caso el orden sí influye en los resultados. Según explica la especialista, debemos poner primero un sérum antioxidante con vitamina C en zonas como el rostro, el cuello y el escote. Una vez que la piel absorbe todos los principios activos, se procederá a la aplicación del bloqueador, asegurando así una protección óptima. Para quienes buscan una defensa más global, Batres recomienda incluir suplementos nutricosméticos específicos formulados con antioxidantes. "Estas cápsulas ayudan a reparar el daño en el ADN y refuerzan la piel frente a la exposición al sol", asegura.
Este artículo salió originalmente en Harper’s BAZAAR España.