Los cigarette jeans son el antídoto perfecto frente a las siluetas amplias que han dominado la moda recientemente. Elegantes y pulidos, este corte recto, delgado pero no skinny, fue un favorito absoluto a lo largo de los años 90 y, en realidad, nunca desapareció del todo. Sus líneas limpias y su facilidad para pasar del día a la noche los convierten en un aliado confiable para elevar cualquier look casual este otoño y más allá.
Un repaso por los íconos del estilo noventero confirma su atractivo perdurable: Carolyn Bessette Kennedy, Julia Roberts, la princesa Diana, Cindy Crawford, Halle Berry, Kate Moss y más. Sus fórmulas off-duty demuestran cuán vigente sigue siendo este corte de mezclilla. Combínalos con botas de punta cuadrada, snip-toe mules, cinturones occidentales, cuellos de tortuga entallados y blazers extragrandes. Y no podemos olvidar otros dos clásicos de culto: el cuero estilo Matrix y los lentes metálicos ultrafinos. Minimalistas en esencia, pero con un filo inconfundible.
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¿La clave para estilizar los cigarette jeans actualmente? Inspírate en las leyendas con fórmulas depuradas que apuestan por líneas limpias, cinturas definidas y accesorios con intención. Prueba con un suéter de cuello de tortuga por dentro de un blazer de hombros marcados, un cinturón preciso que acentúe el look y botines estilizados para rematar. O combínalos con un punto holgado y botas occidentales para un aire más relajado, con inspiración bohemia.
A continuación, ocho outfits que confirman por qué los cigarette jeans son un clásico eterno.
La combinación en negro y café
El dúo negro con café es un esencial noventero que se presta de maravilla para estilizar este corte de mezclilla. Un bomber de gamuza oscuro sobre un suéter de punto carbón, sumado a botas de punta cuadrada, evoca de inmediato el moodboard minimalista de la época: elevado, pero sin pretensiones. Los cigarette jeans aportan la dosis justa de desenfado, suavizando las texturas lujosas de un modo ideal para el día a día.
La fórmula polo + suéter + denim
Este look combina básicos de líneas limpias con giros sutiles y sorprendentes. Comienza con un par de cigarette jeans y súmalos a un polo tejido con cuello. Añade un abrigo de gamuza en tono oliva —como este de COS—, unos snip-toe mules minimalistas y lentes rectangulares delgados para canalizar por completo los 90.
Business casual en equilibrio perfecto
Para un business casual sin complicaciones, apuesta por un blazer holgado y relajado sobre una simple camiseta blanca. Agrega un collar escultórico de cordón y unas botas Chelsea de gamuza para dar un giro moderno y depurado al calzado de inspiración occidental de la década. Un look preciso que, aun así, se siente natural y sin esfuerzo.
Cuidadosamente audaz
Aquí, los detalles sutiles e intencionales son el verdadero diferenciador. Una bota de punta cuadrada más dramática, lentes de sol en formato micro y pulidos, el broche plateado en un bolso de hombro estilizado: cada uno aporta un guiño al minimalismo de los 90 mientras suma personalidad en voz baja. En conjunto, transforman la clásica fórmula de mezclilla y abrigo en algo cool, deliberado y, a primera vista, engañosamente simple.
Un choque de clásicos
Con líneas limpias y una audacia silenciosa, este look canaliza la sofisticación depurada que caracterizaba a Carolyn Bessette Kennedy. Cada pieza —cigarette jeans impecables, un cárdigan suave, loafers pulidos— trabaja en armonía para lograr un outfit sin esfuerzo pero refinado. El abrigo de cuero negro aporta el toque justo de filo, mientras que la diadema de cuero une todo el conjunto con un guiño directo al accesorio característico de Kennedy.
Un momento tan fácil como un domingo por la mañana
¿Existe algo más ingenioso que jeans y ballet flats combinados con tu half-zip más cómodo? Es relajado y acogedor, pero sigue viéndose intencional: logra ese efecto casi mítico de “me lo puse sin pensar”, perfectamente equilibrado.
Royalcore moderno
Esta combinación reúne, a partes iguales, la herencia ecuestre y el refinamiento prep. Una chaqueta tipo tweed ancla el look. Llévala sobre prendas en tonos crema para lograr un estilo que se siente clásico pero actual. Los jeans blancos impecables y el cinturón de gamuza acentúan ese mood minimalista de los 90, mientras que el bolso tote de lona resistente suma un toque de practicidad, perfecto para una vuelta elegante por la ciudad o un brunch al estilo Balmoral. Además, rompe sutilmente con la tradición, equilibrando la formalidad del resto de las piezas de un modo que evocaba a la princesa Diana: atemporal, elegante y con el punto justo de sorpresa.
Western reinventado
Inspirado en la Julia Roberts de los 90, este dúo de mezclilla sobre mezclilla es un clásico infalible, pero aquí recibe un giro otoñal. El scarf coat extragrande aporta calidez estructurada y un acabado pulido, mientras que las botas tipo cowboy estilizadas y un cinturón delgado de gamuza llevan el conjunto hacia un territorio occidental más moderno. Es casual, pero intencional: ideal para esos días en los que quieres verte relajada, no descuidada. (I)
Este artículo salió originalmente en Harper's BAZAAR Estados Unidos.